En una decisión sin precedentes, el Departamento de Policía de Los Ángeles despidió a dos de sus oficiales por presuntamente jugar Pokémon Go durante sus turnos, lo que obstruyó una emergencia policial. Según documentos judiciales, Louis Lozano y Eric Mitchell estaban en una patrulla estacionada cuando recibieron un llamado por robo a una tienda.
No obstante, según las cámaras colocadas en la patrulla de los oficiales, ambos estaban usando el popular videojuego para móviles, optando por perseguir a un Snorlax en vez de acudir al llamado de emergencia. Aunque los oficiales negaron haber estado usando el juego, fueron despedidos al finalizar la investigación.
El caso fue divulgado públicamente luego de que los oficiales presentaran su apelación, la cual fue desestimada. Los documentos señalan que, por aproximadamente 20 minutos, los oficiales pueden ser vistos en un video discutiendo sobre Pokémon Go mientras conducían a diferentes lugares donde capturar a las criaturas virtuales.
Lozano y Mitchell estaban patrullando cuando una sucursal de la cadena Macy’s estaba siendo robada, el 15 de abril de 2017. Otro oficial, el capitán Davenport, que también escuchó la llamada, pudo ver la tienda, y otro auto de la policía estacionado en un callejón cercano. Posteriormente, los dos oficiales le dijeron a un sargento que había estado tratando de contactarlos para brindar respaldo que no habían escuchado la radio.
Los argumentos de los dos oficiales se vinieron abajo cuando sus superiores analizaron los videos de la cámara en su patrulla, los cuales revelaban que ambos pasaron casi 10 minutos discutiendo sobre atrapar un Pokémon: “Mitchell dijo a Lozano que había un Snorlax entre la calle 46 y Leimert”, señalan los documentos del Departamento.
Luego, el dúo se fue en la dirección donde se encontraba el Pokémon deseado. Después de veinte minutos, los oficiales lograron su objetivo y continuaron discutiendo sobre el juego un rato más.
Aunque sus abogados argumentaron que las grabaciones obtenidas de las cámaras en las patrullas no debían usarse para grabar conversaciones privadas y no deberían haberse usado como evidencia, cualquier apelación fue negada, por lo que ninguno de los dos podrá reincorporarse a sus labores.
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Trabajando como arquitecto de ciberseguridad, el se enfoca en protección de datos y la seguridad de datos empresariales. Antes de unirse a nosotros, ocupó varios puestos de investigador de ciberseguridad con diferentes empresas. También tiene experiencia en diferentes industrias como finanzas, salud medica y reconocimiento facial.